Con visión ciudadana

Cuando hablamos de la Universidad necesariamente estaremos hablando de una historia de lucha, de esfuerzo por mayores recursos, una constante lucha por entregar un mejor servicio a la comunidad, por entregar a los jóvenes una educación de calidad para que puedan ellos a su vez ser un instrumento de cambio en la comunidad, la Universidad Autónoma de Nayarit ha sido durante años un pilar de cambio en Nayarit y si bien ha tenido momentos oscuros, bajo la tutela del Rector, Juan López Salazar, la luz continúa emanando con gran intensidad, en mejores programas de estudio, mejores instalaciones, acuerdos docentes y en general en calidad educativa, con un nivel que tiene a la UAN en el top 20 de universidades en el país, un reto nada sencillo considerando las dificultades económicas, un número compacto de alumnos comparado con la UNAM por ejemplo y la adversidad general que implica mantenerse vigente en este mundo cambiante.

Esta pequeña introducción y posicionamiento temporal viene a colación en atención a que en días pasados el rector de la UAN, Juan López Salazar, rindió su Quinto Informe General de Actividades 2014 – 2015, un informe que al igual que en ocasiones anteriores incluyó una larga lista de logros alcanzados por la Universidad, desde la expansión de programas académicos, de la matricula estudiantil y de la calidad académica de los docentes hasta la firma de numerosos convenios con universidades del extranjero para mejorar los conocimientos y la experiencia que adquieran los jóvenes estudiantes.

Con todos estas metas alcanzadas, las palabras del rector durante su participación en el informe cobran mayor relevancia, al expresarse respecto a la tarea y finalidad de la universidad me gustaría destacar el punto que enfatizó con especial detenimiento y es que no podría estar más de acuerdo en que los números por si solos no deben ser la meta, la expansión de presupuesto, mayores instalaciones o una matricula más grande de alumnos no es ni debe ser la meta la de Universidad, si bien todas las anteriores son una consecuencia necesaria de la excelencia académica, la meta ante todo debe ser la transformación del entorno, de la comunidad en general, sea a través de los jóvenes graduados que están haciendo una diferencia en su campo, a través del servicio social o de la cultura del emprendimiento y la consciencia social en todos los egresados, es en estos aspectos donde verdaderamente reside el valor de la Universidad, donde se están concentrando los esfuerzos y donde se están dando los resultados más valiosos.

No en vano, durante el ciclo 2014 – 2015 se atendieron un total de 15 mil 379 alumnos, a través de los distintos programas desde el profesional asociado, pasando por las licenciaturas y culminando en los posgrados, la Universidad es hoy gracias al rector Juan López Salazar, un factor de cambio en Nayarit, muy a pesar de las dificultades financieras que enfrenta la máxima casa de estudios los resultados están ahí a la vista de todos y por más que se intente desestabilizar, crear controversia o caos al interior de la UAN, la labor continua y el propósito sigue firme crear un mejor Nayarit, enhorabuena al buen Rector, Juan López Salazar, cuya tutela ha sido clave para tener a la UAN en niveles de excelencia.