Véritas Liberabit Vos
Queda claro que la Educación existe, pero no es como lo general de los seres que captan inmediatamente nuestros sentidos que coloquialmente quedan demostrados para nuestro intelecto, no es un objeto común como lo es un ser humano, un animal, una planta o un ente inanimado como lo puede ser una roca o un metal, que su presencia o existencia es evidente a nosotros. Queda claro que este tipo de existencia trasciende algo más que los propios sentidos pueden captar y para ello debemos internarnos un poco a lo que los antiguos Filósofos específicamente Aristóteles llamó Filosofía Primera y que posteriormente fue conocida como Metafísica o Estudio del Ser en cuanto Ser, esa famosa cuestión la del SER, el saber si algo es, si ese algo existe, donde existe y sobre todo para qué existe
Valiéndonos entonces de esas aportaciones del estagirita y fortalecidas y orientadas por la Filosofía Tomista donde se proponía el estudio de las causas del ser, aquellas que una vez entendida la causa primera o motor de todas las cosas se podía hallar en ellas otras cuatro causas más encontrando así un sentido que le daba magnitud y dignidad al ser mismo.
Aristóteles distinguía las dos primeras causas como Causas Intrínsecas, o sea causas que eran inherentes al ser en cuestión de esta forma enunciaba La Causa Material y La Causa Formal así explicaba y decía; todo ser para que exista debe tener una materia, sustrato o substancia de que está hecho algo o donde está hecho (causa material) que recibe lo que lo hace ser, su forma propia que lo identifica de los demás seres (causa formal) así por ejemplo El hombre es un Ser de materia (cuerpo) y espíritu (forma), un libro es un ser de hojas, tinta, (materia) su constitución específica (forma).
Haciendo una relación para ambas causas encontramos que la Educación no tiene una causa material propia; esta existe como tal única y exclusivamente en una materia particular que es el Ser Humano, el cual adquiere la Educación como una Cualidad que lo enriquece, así metafísicamente hablando Es el Hombre el Ser mismo de la Educación, por eso es la raíz de la voluntad como causa intrínseca la que debe mover al hombre a buscar prepararse cada vez más, con un apetito del saber.
Las otras dos Causas de que nos habla Aristóteles son las causas extrínsecas o sea aquellas que quedan fuera del Ser pero no por ello son menos importantes, nos habla de la Causa Eficiente y de la Causa Final, estas dos causas nos responden a las preguntas sobre el Ser: ¿ Quién lo hizo? Y ¿Para qué es o cuál es la finalidad? Dos conceptos por demás trascendentes si de Educación hablamos, queda evidente que la Educación la hace el propio educando por medio de su voluntad, pero que esta no se podría llevar a cabo sin el concurso principalmente del Docente, que es la causa eficiente secundaria y ejemplar primigenia de la Educación es quién hará brotar del estudiante todas las potencialidades intelectuales, físicas, estéticas, así como sus valores y actitudes. Culminando con la Causa final de la Educación que no es otra cosa sino el perfeccionamiento y crecimiento del educando que lo hacen ser un hombre de bien que tiene claro la trascendencia de su misión.
Queda así que la Educación no es solo un concepto que puede tener muchas acepciones y sobre todo muchas variantes referentes a los tipos de estrategias educativas que se siguen, y que generan un sinfín de carreras y especialidades, pero eso es la forma de ser, y en ello puede haber una gran multiplicidad. La Educación es un concepto que incide en el Ser Humano y que es vital para el crecimiento de cualquier Nación, por ello bienvenidos todos los impulsos que Nuestro Gobierno Estatal está realizando centrándose en los niños y niñas de Nayarit, que como dijimos son la Causa Material y Eficiente de la Educación así como en la formación Docente causa Eficiente de la misma, esta semilla que se siembra será fruto intelectual y de desarrollo para beneficio de la Patria.