Con esta medida, el Gobernador independiente dijo enviar un mensaje a la ciudadanía respecto de la austeridad que prevalecerá en su gobierno
El Gobernador Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, clausuró la Casa de Gobierno que desde 1991 era utilizada por los mandatarios nuevoleoneses para sus reuniones sociales, aunque en el último sexenio Rodrigo Medina de la Cruz la usó como domicilio particular.
Tras colocar un candado en la lujosa residencia ubicada en el número 200 de la avenida Morones Prieto, en el municipio de San Pedro, “El Bronco” dijo que se ahorrarán 400 mil pesos que cada mes se erogaban para rentar y dar mantenimiento al inmueble, donde además se encuentra un helipuerto que mando construir su antecesor.
Con esa medida, el Gobernador independiente dijo enviar un mensaje a la ciudadanía respecto de la austeridad que prevalecerá en su gobierno, y anunció que los recursos se utilizarán para beneficiar a alumnos de educación superior de comunidades rurales del sur del estado.
“Creo que si tú quieres ser gobernador de un estado, antes tienes que poner el ejemplo y no vivir en el lujo. Siempre se atendió en esta casa a la élite gubernamental, entonces, hoy terminamos este historial”.
Agregó: “Nos vamos a ahorrar casi 400 mil pesos mensuales, que en el año son casi 5 millones de pesos. Los vamos a destinar para construir un albergue en La Chona para todos los estudiantes del sur del estado”, es decir, los inscritos en la Universidad Autónoma de Nuevo León que viven en la comunidad La Ascención, del municipio de Aramberri.
“El Bronco” anunció que los muebles propiedad del gobierno de Nuevo León que estaban en la Casa de Gobierno –rentada desde tiempos del gobernador Sócrates Rizzo García– serán enviados a la Torre Administrativa, un edificio subutilizado por la administración pasada.
Acompañado de Miguel Treviño de Hoyos, coordinador ejecutivo de la Oficina del gobernador, Rodríguez Calderón dijo que así como ordenó terminar el contrato con esa residencia onerosa, revisará las propiedades que tiene rentada la administración para desprenderse de las que sean innecesarias.
Antes, el mandatario hizo un recorrido por todos los rincones del inmueble, que cuenta con alberca y lujosas estancias. La residencia era propiedad del fallecido Ovidio Elizondo, quien además de ser proveedor del gobierno, ocupó diversos cargos en las administraciones de Sócrates Rizzo, Natividad González y Rodrigo Medina.