El líder del PRD exhortó a las autoridades correspondientes a investigar y tomar “medidas radicales” en todos los centros penitenciarios
El presidente del PRD, Agustín Basave Martínez, pidió que el motín del penal de Topo Chico, en Monterrey, Nuevo León, no se vea como un hecho aislado y se tomen medidas, pues las cárceles en México “son unas bombas de tiempo”.
“Cada vez que hay un problema de estos se toma como un hecho aislado y se hace algún escándalo mediático, pero ahí queda. El problema es de mucho más fondo, el problema exige que se tomen medidas muy radicales para el manejo de los centro penitenciarios”, enfatizó Basave.
En ese sentido dijo que muchos de estos centros son controlados por los prisioneros, sobre todo por quienes son los más peligrosos e incluso los visitadores han sido recibidos con armas de fuego por los internos.
“Hay casos patentes, flagrantes, de cómo los propios internos, los presos, controlan las cárceles. Todo se paga, todo se compra, por todo se les cobra”, argumentó.
Expuso que mucha población recluida, incluso la mitad de ella, no está sentenciada y son los mismos reos quienes padecen las consecuencias; específicamente aseguró que quienes murieron en Topo Chico, ubicado en la entidad gobernada por Jaime Rodríguez Calderón, se encontraban en esta situación.
“Hubo quienes dijeron, bueno pues, se mataron entre ellos, son criminales, como si no tuvieran derechos humanos. Pero además, como digo, muchos de ellos ni siquiera estaban sentenciados. Ese es un problema gravísimo”, apuntó.