El director general del Seguro Social, Mikel Arriola, indicó que se pondrá en marcha el primer trimestre de 2017 y estará enfocado a enfrentar la emergencia sanitaria
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pondrá en marcha, durante el primer trimestre de 2017, un nuevo modelo preventivo para enfrentar la emergencia sanitaria por diabetes y obesidad que se vive en el país, el cual abordará de manera anticipada la aparición de diabetes, enfermedades cardiovasculares, cáncer de mama y de próstata, al aumentar el número de chequeos, mastografías y del antígeno prostático.
Al grito de “Ojo con la diabetes”, Arriola inauguró el evento nacional para conmemorar el Día Mundial de esta enfermedad, que reunió a dos mil 700 personas de la sociedad civil y enfermeras en la Macro Plaza de Monterrey, quienes integraron un círculo azul, símbolo de la lucha contra el padecimiento, con la intención de enviar un mensaje de prevención y toma de conciencia de la enfermedad y sus secuelas.
Explicó que las Unidades de Medicina Familiar donde los pacientes tienen el primer contacto con el personal de salud, harán cortes para establecer dónde están los grupos de riesgo en la población, a fin de invitarlos al chequeo PREVENIMSS, hacer el diagnóstico de las enfermedades y controlar o atenderlas, según sea el caso.
“Debemos aprovechar toda la información que tenemos en primer nivel y empezar a invertirle más para llegar antes de que se materialice el riesgo y atajar antes el problema de las enfermedades crónicas”, afirmó.
El titular del Seguro Social señaló que se atiende a más de 3.5 millones de derechohabientes con diabetes, con un costo anual para su atención de 51 mil millones de pesos. Atrás de esta enfermedad, dijo, hay una pérdida de 17 años de vida saludable y es la principal causa de muerte en cualquier sistema de salud.
Indicó que una persona con diabetes bien controlada tiene un costo de alrededor de cien pesos al año, mientras que el derechohabiente que ya recibe hemodiálisis y está conectado a una máquina tres veces a la semana, le cuesta al sistema 320 mil pesos al año.