La medallista de bronce en Londres 2012 tampoco irá a Juegos Panamericanos. Podría regresar para Río 2016
La clavadista mexicana Laura Sánchez, medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, está embarazada y no podrá participar en los Juegos Panamericanos de Toronto (julio) y el Campeonato Mundial de Kazan, Rusia (julio-agosto), donde se repartirán las primeras plazas para los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Sánchez, esposa de su entrenador Francisco Rueda, tiene programado dar a luz a finales de año, lo que también le complica la posibilidad de acudir a la Copa del Mundo de febrero del próximo año en Río de Janeiro, último evento que reparte plazas a Juegos Olímpicos.
“En el estricto sentido deportivo es una pérdida sensible, vamos a tratar de llenar ese huecote con los prospectos que tenemos”, dijo Juan Colín, responsable de clavados de la Federación Mexicana de Natación (FMN).
En los Juegos Panamericanos de Toronto calificará a Juegos Olímpicos el primer lugar de las pruebas individuales, en el Mundial las mejores 12 y en la Copa del Mundo de Río de Janeiro 18 clavadistas más.
Todas esas son plazas para el país, que debe definir un mes antes de Juegos Olímpicos, que inician el 5 de agosto, los nombres de sus representantes.
Por esa razón, el presidente de la Federación Mexicana de Natación (FMN), Kiril Todorov, señaló hace unas semanas que los boletos que obtengan los clavadistas mexicanos serán para el país y que en un selectivo interno se definirá quiénes ocupan esas plazas.
“Yo no descartaría a Laura porque cuando llegue a término su embarazo tendrá una oportunidad. Vamos a ver qué tan factible es que regrese, de todas formas habrá selectivos”, señaló Colín
Con la ausencia de Laura Sánchez, México tendrá como opciones a Paola Espinosa, quien debe definir aún en qué pruebas participará, a Dolores Hernández que ganó dos oros en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz y a Arantxa Chávez, quien hacía pareja con Laura Sánchez.
Entre ellas tres deben salir las dos representantes individuales, mientras que en el sincronizado se abre el panorama para el dueto de Espinosa y Hernández.
“Tienen un sexto lugar en la Copa del Mundo del año pasado, este año llevan una medalla en la Serie Mundial. Ellas tendrán más fogueo porque tendrán todas las series mundiales y me atrevería a decir que será un buen fogueo para tener una digna representación”, dijo Colín.
Mientras está embarazada, el reglamento de CIMA indica que la deportista mexicana mantendrá todos sus apoyos, incluida la beca de más de 52 mil pesos que recibe anualmente.
Quien sí podría verse afectado será Francisco Rueda, su entrenador y esposo, quien percibe 78 mil pesos mensuales y no tendrá atletas del mismo nivel para justificar su permanencia. Ni Sánchez ni Rueda dieron declaraciones.
Se pierde casi todo el ciclo
La ausencia en los Juegos Panamericanos de Toronto, que se inauguran el 10 de julio, es el segundo evento prioritario que se pierde Laura Sánchez, quien por una lesión no pudo estar en noviembre de 2014 en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Veracruz.
Sánchez declaró que después de Londres 2012 buscaba priorizar su desarrollo personal y su familia, pero al no quedar embarazada continuó como seleccionada nacional.
Unos días antes del selectivo para el Mundial de Barcelona 2013, Arantxa Chávez, su pareja en la prueba sincronizada, sufrió un accidente en motocicleta y ya no pudieron participar en el selectivo para obtener el pase al Mundial.
Laura fue en la prueba individual y quedó octava. Ése ha sido su mejor resultado en el ciclo olímpico, pues el año pasado acabó novena en la Copa del Mundo y al final de la temporada ya no acudió a Veracruz por lesión y este año no estará ni en Juegos Panamericanos ni en el Campeonato Mundial que se realizará en Kazan, Rusia.