Biden prohíbe las importaciones de energéticos de Rusia a EE.UU.

El presidente Joe Biden anunció la decisión de Estados Unidos de prohibir las importaciones de petróleo, gas natural y carbón de Rusia como respuesta a la invasión de Ucrania.

«Estoy anunciando que Estados Unidos está apuntando a la arteria principal de la economía de Rusia. Estamos prohibiendo todas las importaciones de petróleo, gas y energía rusos», dijo Biden en declaraciones desde la Casa Blanca. «Eso significa que el petróleo ruso ya no se aceptará en los puertos estadounidenses y el pueblo estadounidense asestará otro poderoso golpe a la maquinaria de guerra de Putin», añadió.

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Estados Unidos tomará la medida de forma unilateral, sin contar con sus aliados europeos, debido al desacuerdo entre las naciones de Europa sobre la conveniencia de prohibir la energía rusa. Los países de la Unión Europea tienen mayor exposición a la energía rusa que Estados Unidos. De hecho, Biden reconoció que sus aliados europeos no estaban en la misma posición que EE.UU. para tomar esa decisión.

«Estamos avanzando con esta prohibición entendiendo que muchos de nuestros aliados y socios europeos pueden no estar en condiciones de unirse a nosotros. Estados Unidos produce mucho más petróleo internamente que toda Europa, todos los países europeos juntos. De hecho, somos un exportador neto de energía. Entonces podemos dar este paso cuando otros no pueden”, explicó. Y también citó los pasos hacia una estrategia a largo plazo para ayudar a otros países de Europa.

Los funcionarios estadounidenses decidieron que, dada la extrema presión política en su país, podían actuar sin la coalición y no crear mayores problemas. Las importaciones que de Rusia a EE.UU. constituyen una pequeña porción del universo energético: aproximadamente el 8% en 2021, del cual solo alrededor del 3% fue crudo. Funcionarios económicos de la Casa Blanca han trabajado durante más de una semana sobre cómo manejar cualquier decisión de cortar esas importaciones, indicaron los funcionarios. El Departamento de Energía informó que en las últimas dos semanas de febrero, las importaciones de petróleo ruso cayeron a cero debido a que las empresas estadounidenses cortaron los lazos con Rusia, implementando de manera efectiva su propia prohibición.

Biden también señaló que tiene «un fuerte apoyo bipartidista» para esta medida, del Congreso como del país. “Tanto los republicanos como los demócratas han dejado claro que debemos hacer esto”, dijo. Aunque reconoció que habrá “costos” para los estadounidenses.

En esa línea habló de liberar barriles de la Reserva Nacional Estratégica y dijo que seguiría trabajando “con todas las herramientas a nuestra disposición” para mantener los precios bajos.

Biden también hizo un llamado a las compañías de gas para que eviten explotar la situación actual. “Entendemos que la guerra de Putin contra el pueblo de Ucrania está provocando un aumento de los precios. Lo entendemos, eso es evidente. Pero, pero, no es excusa para implementar aumentos de precios excesivos o incrementar las ganancias o cualquier tipo de esfuerzo para explotar la situación”, indicó.

También advirtió que “no era momento para especular con los precios”, algo que Estados Unidos “no tolerará”. “Este es el momento en que tenemos que hacer nuestra parte para asegurarnos de que no nos estamos aprovechando”, señaló.

Además, trató de responder a los críticos republicanos, diciendo que «simplemente no es cierto» que las políticas de su administración están frenando la producción de energía nacional, mientras promocionaba «niveles récord de producción de petróleo y gas».

Biden también destacó otro tipo de apoyo a Ucrania, incluidos envíos de armas defensivas y apoyo humanitario.

Biden dijo que las medidas tomadas de EE.UU. y otros aliados hasta ahora han “causado que la economía rusa, francamente, se desmorone”. Señaló otras acciones que han «paralizado» la capacidad de Moscú «para hacer negocios con el resto del mundo». Y elogió a las empresas que han suspendido sus operaciones en Rusia, incluidas Visa, Mastercard, Ford, Nike y Apple.

Presión para la prohibición de importaciones

Tanto en conversaciones públicas como privadas, los principales aliados de EE.UU. han dicho que el país probablemente actuaría por su cuenta si apuntaba contra las importaciones de energía de Rusia. Lo que planteó sus propias preocupaciones dentro de la Casa Blanca, a medida que a los funcionarios de EE.UU. siguen recelosos de llevar a cabo cualquier acción que fragmente la alianza cuidadosamente coordinada que ha servido como punto focal de la respuesta hasta este momento.

Sin embargo, la presión política tanto de los republicanos como de los demócratas llevó a que aplazar la prohibición fuera insostenible.

“Es un porcentaje bastante pequeño de la energía que ingresa a EE.UU., pero es fundamental para Europa occidental”, dijo en la mañana de este martes el senador de Delaware, Chris Coons, en “New Day” de CNN.

El demócrata agregó: «La fuerza de nuestras sanciones, de los costos que le estamos imponiendo a Putin por esta brutal invasión de Ucrania, son más exitosas y más sostenibles cuando están coordinadas. Entonces, respeto el hecho de que el gobierno se esté coordinando con nuestros aliados europeos y asegurándonos de que hemos hecho el trabajo preliminar para entender cómo implementar efectivamente una prohibición sobre la energía rusa».

Las sanciones que Occidente ha impuesto a Rusia tras su invasión no provocada de Ucrania hasta ahora han eximido a las exportaciones de petróleo. Pero Biden se ha enfrentado a la presión tanto de los demócratas como de los republicanos para imponer restricciones más severas al sector energético de Rusia. Lo que podría causar más daño a la economía del Kremlin que las represalias económicas tomadas hasta ahora.

Biden mantuvo una llamada telefónica durante el fin de semana con los principales miembros de su gobierno para discutir una posible prohibición de las importaciones de petróleo ruso, según el secretario de Estado Antony Blinken.

Los funcionarios de la administración de Biden también viajaron a Venezuela durante el fin de semana para sostener conversaciones sobre la posibilidad de permitir que este país venda su petróleo en el mercado internacional. Una medida que ayudaría a reemplazar el combustible ruso. Biden también puede viajar a Arabia Saudita mientras Estados Unidos trabaja para convencer al reino de que aumente su producción. Las conversaciones subrayan cómo la invasión de Rusia ha alterado las relaciones internacionales y ha obligado a EE.UU. y otras naciones a buscar soluciones en lugares que normalmente han evitado.

Rusia advierte que el precio del petróleo subirá

Los países occidentales podrían enfrentarse a precios del petróleo superiores a los US$ 300 por barril y al posible cierre del principal gasoducto entre Rusia y Alemania si los gobiernos cumplen sus amenazas de cortar el suministro de energía procedente de Rusia, dijo el lunes el viceprimer ministro de Rusia, Alexander Novak, en una declaración en la televisión estatal.

«Está absolutamente claro que un rechazo al petróleo ruso llevaría a consecuencias catastróficas para el mercado global», dijo Novak. «El aumento de los precios sería imprevisible. Sería de US$ 300 por barril, si no más».

Los precios del petróleo alcanzaron este lunes sus niveles más altos desde 2008, superando los US$ 4 el galón (3,79 litros), después de que el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, dijera que Washington y sus aliados europeos estaban considerando la posibilidad de prohibir las importaciones de petróleo ruso.

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