Miles de personas salieron a las calles de varias ciudades de Estados Unidos para exigir la permanencia del programa DACA
Miles de personas salieron ayer a las calles de numerosas ciudades de Estados Unidos para criticar que el presidente Donald Trump y el Congreso no hayan encontrado una solución para regularizar la situación de casi 700 mil jóvenes indocumentados, dentro del plazo de seis meses establecido.
“El Congreso tuvo seis meses para presentar una ley y nos falló; estamos aquí para decirles que vamos a seguir luchando por nuestros derechos como comunidad”, apuntó Víctor Morales, un mexicano indocumentado de 24 años que asistió a la protesta en Washington y cuya protección expira en un año.
En la capital protestaron más de 300 personas, que se reunieron delante del monumento a Washington y marcharon hasta el Capitolio, lugar donde varias decenas de manifestantes hicieron actos de desobediencia civil y fueron detenidos.
Alrededor del país Nueva York, Las Vegas (Nevada), Filadelfia (Pensilvania), Orlando (Florida) y Houston (Texas), entre muchas otras urbes, se sumaron a esta iniciativa.
La inmigrante mexicana Alexandra González, de 21 años, marchó hacia el Congreso con otras 200 personas sosteniendo un cartel con una foto de su primo Edder Sánchez, de 26 años.
“Fue arrestado en Atlanta, y su DACA fue revocado ilegalmente. La policía migratoria ICE lo puso en un centro de detención en condiciones inhumanas y aceptó una repatriación voluntaria”, contó.
“Tenemos que presionar más para obtener una ley de inmigración. Queremos una solución permanente y un camino a la ciudadanía”, sostuvo esta estudiante de la Universidad de Carolina del Sur.
El fin definitivo del DACA, fijado para el 5 de marzo, está en suspenso. Dos fallos de jueces de California y Nueva York suspendieron temporalmente la decisión de Trump de acabar con este programa, aprobado por su predecesor Barack Obama en 2012.
“Es 5 de marzo y los demócratas no han hecho nada sobre el DACA. Les dimos seis meses, sencillamente no les importa. ¿Dónde están? ¡Estamos listos para hacer un acuerdo!”, tuiteó el presidente este lunes.
Los demócratas culpan a su vez a los republicanos de la falta de acuerdo sobre el Dream Act, la legislación que les permitiría quedarse en EU de manera permanente.
“El Congreso no se decide, no sabe qué quiere hacer con nosotros. Dicen una cosa y salen con otra. Yo les pido que no jueguen con nuestras vidas”, dijo Lizbeth Huitzil, una mexicana de 19 años que estudia biología, en una pequeña protesta celebrada frente a la Trump Tower.
“Hagan su trabajo. ¡Aprueben un Dream Act limpio!”, sin condiciones a cambio, añadió.
Trump exigió en enero que cualquier proyecto de ley sobre ese tema incluya fondos para el muro y reformas al sistema de migración legal, imposiciones que los demócratas no ven con buenos ojos.