El poder de Salinas de Gortari

Caldero Político

No hay que hacerse bolas para entender que en México nada se mueve sin la influencia o poder del ex presidente Carlos Salinas de Gortari. Sus nexos con los hombres más prominentes en materia financiera, con los grupos de poder, con los partidos políticos y con la ‘nomenklatura’ que dirige los destinos electorales del país, lo mantienen vivo, activo y persistente en el timón de México. Se dice que mantiene relaciones con el crimen organizado, algo imposible de asegurar.

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Cualquier candidato a la Presidencia de la República tiene que ver con Salinas, y en grado supremo dependen de sus hilos, igual que el actual mandatario nacional, eso nadie lo duda. AMLO, Anaya, Meade y demás, son cercanos a CSDG.

Para nadie es desconocido que dentro de la crisis de popularidad que enfrenta su gobierno, el presidente Enrique Peña Nieto recurre a los salinistas para intentar mejorar sus niveles de aprobación entre los mexicanos. Peña ha puesto su imagen en manos de dos operadores del salinismo que son parte de la nueva generación de priístas en el poder.

La fuga del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, además del caso de la Casa Blanca y la tragedia de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, han pegado en la línea de flotación del gobierno priísta y en la figura presidencial tanto en México como en el exterior.

En un intento por relanzar su administración para el cierre de su sexenio, el presidente mexicano ha reajustado su gabinete colocando en puestos clave de la poderosa Oficina de la Presidencia, a dos hijos de ex colaboradores de Carlos Salinas de Gortari. La influencia del ex presidente Salinas de Gortari está hoy reflejada en el gobierno de Peña Nieto en varias posiciones del gabinete presidencial. Está la secretaria general del PRI, y ex canciller Claudia Ruiz Massieu –hija de José Francisco Ruiz Massieu y Adriana Salinas de Gortari– pero el toque salinista existe principalmente en dos de los más recientes nombramientos de integrantes de su burbuja de poder. Igual domina direcciones y secretarías de Estado.

Uno de ellos es Andrés Massieu Fernández, quien hace un mes fue designado coordinador general de Política y Gobierno de la Presidencia de la República. La otra incorporación salinista al equipo más cercano de Peña Nieto es Paulo Carreño King, ex director de Comunicación de Grupo Banamex y nombrado por el mandatario como coordinador de Marca País y Medios Internacionales de la Presidencia. Carreño King es hijo del periodista José Carreño Carlón, ex vocero en la última etapa del sexenio de Salinas de Gortari y cercano en el  Fondo de Cultura Económica.

La inclusión de estos jóvenes priistas en el “war room” presidencial, hace más visible la influencia de Salinas de Gortari en el gobierno peñista y en el proceso electoral en puerta.

Salinas en el escenario

El ex mandatario Carlos Salinas de Gortari participó en la 25 edición de la Cumbre México 2015, que organizó la revista británica The Economist. Salinas de Gortari criticó la actuación de su sucesor en la presidencia, Ernesto Zedillo y aseguró que la crisis del año de 1995, a consecuencia del llamado “error de diciembre”, desprestigió las privatizaciones de empresas paraestatales que se concretaron en su sexenio.

“En ese momento se interrumpió el proceso de crecimiento y vino una recesión terrible, y desafortunadamente perdimos el gran momento en que la economía norteamericana, con el presidente Clinton, inició el proceso de expansión más largo y sostenido de su historia”, dijo Salinas de Gortari. Sus críticas también salpicaron al banquero Carlos Slim, dueño de la empresa Telmex, privatizada durante su gobierno y del que se dice que es su socio, además de patrocinador de Andrés Manuel López Obrador.

“Hay empresas emblemáticas que se privatizaron y que, con el paso del tiempo, no dieron el resultado que se esperaba de ellas. ¿Quieren que digamos nombres o mejor no hablamos de Telmex?”, preguntó a los asistentes. La reaparición pública de Salinas de Gortari estuvo acompañada también de una entrevista otorgada a la periodista dominicana, Nuria Piera, quien le preguntó sobre su influencia en el gobierno de Enrique Peña Nieto, entre otros temas como el narcotráfico y Donald Trump.

¿Realmente usted maneja las fichas del gobierno de Peña Nieto? De hecho muchos funcionarios fueron suyos. Está su sobrina como canciller. ¿Tiene usted influencias?

Evasivo, el ex presidente mexicano contestó: “Yo me dedico a la batalla de las ideas. Me interesa el debate de las principales tendencias que estamos viendo. Vivimos un mundo muy complejo, es una época de ansiedad, la gran crisis económica global del 2008 no termina por solucionarse, se le llama la gran recesión, y ahora lo que llaman lo nuevo normal es el estancamiento económico (…)”.

La periodista, al ver que Salinas de Gortari evadió responder, volvió a cuestionar al ex mandatario sobre su interferencia en el gobierno de Peña Nieto.

La pregunta no fue esa.  La pregunta es si usted es un gran influenciador, si usted maneja las fichas detrás del poder, después de su regreso, de su exilio, si realmente se ha fortalecido en la estructura.

“Ya se la respondí: Estoy participando en el debate de las ideas. Ese es el importante”, reviró el ex mandatario.

¿Ese fue un sí entonces?

“Ese es un sí de que estoy participando en el debate de las ideas. En ese terreno que es donde yo creo que quienes tenemos experiencia en la vida pública buscamos mantenernos informados de las grandes corrientes del pensamiento universal y tratemos de dar razones además de emociones”, agregó.

Influencia en las próximas elecciones

Nadie duda ni un poquito que Salinas de Gortari tiene las manos adentro del proceso electoral de este año, apoyando sino a todos, a la mayoría de los candidatos, otorgándoles figuras de su “establo” para que los respalden.

Carlos Salinas de Gortari (nacido en Ciudad de México; 3 de abril de 1948) es un economista y político mexicano que fue presidente de México del 1 de diciembre de 1988 al 30 de noviembre de 1994. Previamente había sido secretario de Programación y Presupuesto en el gobierno de Miguel de la Madrid. Posteriormente, fue postulado candidato por el Partido Revolucionario Institucional en 1987. Resultó elegido presidente de México el 6 de julio de 1988. Ciertamente durante su sexenio, se dieron importantes cambios económicos, entre ellos firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, privatización masiva de empresas estatales, incluida la banca; la implementación del Programa Nacional de Solidaridad y el aumento de desigualdad en el país. Además se restauraron las relaciones Iglesia-Estado y se establecieron relaciones diplomáticas con la Santa Sede.

Salinas fue el último presidente al que se le asignó una partida presupuestal cuyo gasto no estaba sujeto a comprobación, denominada comúnmente partida ‘secreta’. Sin embargo, en las administraciones subsecuentes a la suya este tipo de gasto ha sido ejercido en secretarías de Estado con fundamento en el artículo 74 constitucional.​ Aún después de haberse retirado de la vida pública de su país al finalizar su sexenio, durante los últimos años ha tenido apariciones públicas por invitación de instituciones tanto mexicanas como de otros países. Tal es el caso de sus ponencias dadas en la Universidad de Oxford,​ el Centro de Estudios Espinoza Yglesias,​ la Fundación José Ortega y Gasset,4​ así como en el marco del Vigésimo Aniversario del Instituto Federal Electoral,​ entre otras. Actualmente vive con su segunda esposa, Ana Paula Gerard Rivero. Hace unos días fue entrevistado por TELEVISA.

VEREMOS Y DIREMOS.

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