El Siervo de la Nación

Véritas Liberabit Vos

En esta ocasión hablaremos del segundo personaje más importante en el proceso independentista de nuestra Patria, nos referimos a José María Morelos y Pavón, aquél  de quién el gran general y conquistador  Napoleón Bonaparte se refirió asombrado al conocer sus hazañas en la campaña contra los realistas diciendo “Denme cinco Morelos y conquistaré el mundo”, aquél cuya imagen es representada por un legendario paliacate en la cabeza, algunos autores mencionan que por ser de origen mulato y para evitar ser señalado en ciertos círculos cubría su cabello rizado con dicho aditamento, para otros era debido a un padecimiento de migraña donde la hipótesis de algunos historiadores es que junto al lienzo usaba monedas de cobre o ciertas hierbas que lo ayudaban a paliar las dolorosas cefaleas.

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Hablar de Morelos es hablar del más brillante de los jefes militares quién a la muerte de Hidalgo (1811) y tras un breve paso por parte del General Ignacio López Rayón al frente de la insurgencia, la figura de Morelos vendrá a cubrir lo que se conoce como la segunda etapa del movimiento de independencia y que abarcará del año de 1811 hasta el año de 1815, periodo en el cual el movimiento fue capaz de desarrollar cuatro campañas militares además de la obra política y administrativa en la que se recoge un pensamiento mucho más avanzado del halo de libertad, con un espíritu innovador lleno ya de un sentido social y con un carácter popular.

La figura de Morelos nos marca una pauta que da guía al movimiento iniciado por Hidalgo quién imprimió un estilo de más pálpito que cálculo, donde incluso se sabe de discrepancias fuertes con sus lugartenientes en particular con Ignacio Allende, del quién se dice varias veces buscó la manera de evitar que el cura de Dolores continuara en su afán de permitir los saqueos sin control que la tropa hacía al derrotar a los realistas,  como fueron los casos de Guanajuato y Guadalajara entre otros.

La obra y legado que como líder, estratega y ser humano dejó Morelos son de gran importancia, ya que supo amalgamar las capacidades de quienes formaban parte cercana de ejército como lo fueron Hermenegildo Galeana rico hacendado que se unió a la causa, la familia Bravo destacando entre ellos el político y militar Nicolás Bravo quien es conocido como el “héroe magnánimo” ya que de acuerdo a la historia perdonó la vida de más de 200 militares realistas luego de que Morelos ordenara fusilarlos como represalia a la ejecución de su padre Leonardo Bravo, todos los perdonados se dice se unieron a las filas de los insurgentes (después de la Independencia, Nicolás sería Presidente en tres ocasiones), y qué decir de su principal lugarteniente Mariano Matamoros.

En los anales queda la célebre Batalla de Cuautla acción emprendida entre el 19 de febrero y el 2 de mayo de 1812 donde el ejército insurgente es sitiado por las tropas de Félix María Calleja, resistiendo por más de 73 días, ahí con menos armamento y víveres la estrategia y audacia de Morelos fue mucho mayor que la superioridad y fuerza de los españoles, aquí en este Sitio surge otro héroe representativo del valor del pueblo, nos referimos a Narciso Mendoza mejor conocido como “El niño artillero” un niño de doce años que formaba parte de la tropa de los Emulantes que estaba a cargo del hijo natural de Morelos Juan Nepomuceno Almonte quién al ver que las fuerzas realistas avanzaban sobre el sitio, tomo una tea y encendió un cañón que justo estaba dirigida su boca hacia el contingente que atacaban, dicha explosión dio un  respiro importante a los insurgentes que resistieron valerosamente ante la presión enemiga.

Además de lo militar es de reconocer su intento por lograr en lo diplomático la Independencia convocó al Congreso de Anáhuac primer cuerpo legislativo que sesionó en Chilpancingo de septiembre a noviembre de 1813, allí presento sus Sentimientos de La Nación compendio de ideas para eliminar la esclavitud, formar una nueva nación y lograr el beneficio de los más oprimidos, posteriormente el Congreso aprobaría el 22 de octubre de 1814 en Apatzingán lo que se conocería como la primera Constitución del País.

Declinó la oportunidad de ser tratado como alteza o generalísimo y en su lugar prefirió el título de Siervo de la nación inspirado en el capítulo 10 del Evangelio de san Marcos.

Es capturado el 5 de noviembre de 1815 por las tropas realistas es juzgado y fusilado en Ecatepec un 22 de diciembre de 1815 culminando con él el segundo capítulo de la lucha por nuestra Independencia, quedando así controlada la insurgencia de 1815 a 1820.

Existe la difundida versión  que los restos de Morelos no son los que se encuentran en el Ángel de la Independencia, algunas versiones apuntan a que su hijo Juan N. Almonte se deshizo de ellos en el mar durante un viaje a Europa, ¿será? Por cierto este personaje hijo de Morelos participó activamente con el grupo conservador que invitó a un Príncipe extranjero a ser monarca de México, pero eso… ya es otra historia.

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