Ingredientes
-1 cebolla morada
-¼ taza de aceite de oliva
-Pimienta negra
-Una variedad de tomates pequeños
-2 tomates grandes, cortados en rebanadas gruesas
-200 gramos de queso feta, cortado en rebanadas gruesas
-Albahaca fresca
-½ taza de vinagre balsámico
-1 cucharada de azúcar morena
-Sal, al gusto
Preparación
1. Precalienta el horno a 180ºC. Corta la cebolla en rebanadas delgadas. Pon la cebolla en un molde para hornear, rocía con aceite de oliva y rostiza en el horno durante 30 minutos.
2. Pon las rebanadas de queso feta junto con las cebollas y rocía con aceite de oliva. Acomoda algunas rebanadas gruesas de jitomate sobre el queso y los tomates pequeños alrededor del molde. Rocía una vez más con aceite de oliva y sazona con pimienta. Regresa al horno y rostiza de 35 a 45 minutos.
3. Mientras tanto agrega el vinagre balsámico y el azúcar morena a una olla pequeña. Deja que hierva a temperatura media, baja la temperatura y hierve a fuego lento hasta que se haya reducido a la mitad. Separa.
4. Deja enfriar durante 5 minutos. Decora con albahaca y sirve caliente con la reducción de balsámico y un toque de sal.