En octubre de 2016 el senador Emilio Gamboa Patrón se vio involucrado en un escándalo cuando el helicóptero en el que viajaba aterrizó en el Parque Nacional Arrecife Alacranes de Yucatán. Un año después, el coordinador del PRI en la Cámara alta vuelve a dar la nota al emplear un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana para presuntamente ir a jugar golf al Campo Marte.
De acuerdo con información difundida por el diario REFORMA, el priista utilizó la aeronave con matrícula XC-LNR, uno de los 11 helicópteros de la Coordinación General de Transportes Aéreos Presidenciales (CGTAP), dependiente del Estado Mayor Presidencial.
Antes de que la aeronave despegara, Gamboa conversó con uno de los pilotos de la Fuerza Aérea, mientras lo seguían sus dos acompañantes. En tanto, uno de sus colaboradores se acercó al transporte oficial con una bolsa de bastones de golf.
En el Campo Marte, sede del Mundial de Tiro con Arco, el equipo femenil de ese deporte tuvo que interrumpir por unos minutos su práctica oficial con miras al campeonato, por el aterrizaje y despegue del helicóptero.
Alejandra Valencia, cuarto lugar en Río 2016 y quien presenció los hechos, señaló que siempre se han presentado interrupciones o fallas técnicas, pero no le había tocado que ocurriera por un helicóptero.
“Nunca había visto aterrizar un helicóptero tan cerca. Fueron como 15 o 20 minutos de pausa”, comentó al diario.
Hace un año, también en octubre, Gamboa y Guillermo Ruiz de Teresa, funcionario de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), fueron invitados por el presidente de Grupo Dicas, Emilio Díaz Castellanos, a un paseo en helicóptero y luego en yate por el Parque Nacional Arrecife Alacranes de Yucatán.
Tras el hecho, el priista reconoció que había sido un error, pero la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) sólo multó al piloto del helicóptero, al arrendador y al propietario de la embarcación.
Antes, en abril de 2015, el entonces titular de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) David Korenfeld Federman utilizó un helicóptero oficial para viajar junto con su familia, aparentemente hacia el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Tras darse a conocer el hecho en redes sociales, Korenfeld renunció a su cargo, y en su cuenta de Twitter reconoció que había cometido “un error inexcusable”, ofreció disculpas y cubrió el costo de la utilización de la aeronave.