Miles de personas recorrieron avenidas importantes del Centro tapatío para exigir la legislación del matrimonio gay

La fuerte lluvia vespertina del sábado no afectó a las personas que se habían citado en el cruce de Hidalgo y Chapultepec para marchar en demanda del matrimonio igualitario. El contingente formado principalmente por seis organizaciones, que comenzó con unas 70 personas, creció rápido hasta cerca del millar, calculó un policía vial. Las pancartas que ya se agitaban buscaban justificar sus exigencias: “¿Mismos impuestos? ¡Mismos derechos!”.

Orgullosos, comenzaron a avanzar y a proferir sus peticiones y reclamos: “¡Nos vamos a casar y vamos a adoptar!”; ¡Matrimonio y adopción para toda la nación!”.

“Buscamos la igualdad y que ya armonicen el código civil en el estado de Jalisco con lo que ya aprobó la Suprema Corte de la Nación”, demandó Alejandro Mendoza, integrante de uno de los grupos, Gardenias Tapatías. No es un capricho, según expuso, es exigir el derecho humano, como matrimonio, de seguro social para sus parejas, de adopción, de formar una familia.

Sin embargo, reconoció que las condiciones para que se legisle no son del todo buenas: “Si lo fueran ya estuvieran legislando en el Congreso. Yo me quiero imaginar que se están esperando, ¿y por qué se están esperando? No lo sé”.

Belinda Aceves, maestra heterosexual de la UdeG, que imparte la clase de Salud Mental, apoyaba la marcha y criticó las condiciones en el Estado que han atrasado la aprobación del matrimonio igualitario: “Lo más difícil que tenemos es el conservadurismo por las iglesias de las diversas religiones. Que sean conscientes que las familias son diversas, se componen de muchas maneras”.

Y del otro lado, una espectadora llamada Gloria Estela Romero, discrepó de sus demandas: “Está bien que defiendan sus derechos, cada quien su sexualidad, lo que sí no veo bien es que quieran tener familia, porque ¿cómo van a crecer los niños?”.

Pero pese a todo en los presentes había optimismo y compromiso con su causa: un cambio en Jalisco. Como Paulina Ortiz, quien caminaba con su pareja, pues aseveró que si pudiera se casaría, y aquí: “Si eres jalisciense te importa lo que pase en tu estado”.

Leonardo Espinoza, presidente de Codise AC, tiene por cierto que tarde que temprano se va a aprobar el matrimonio igualitario en la Entidad: “Lo que queremos es que se agilice el proceso”. Vio disposición en el Congreso, pero duda que se apruebe en la presente legislatura.

Hacia las seis de la tarde el contingente tomó la fuente de Plaza Guadalajara, y frente a la catedral alzaron sus pancartas.

El resto de los tapatíos repartía su atención con apatía entre el nutrido grupo y los mimos.