Por cumplir sus cincuenta años de casados, la pareja formada por Don José y Doña Guadalupe, bendijeron de nueva cuenta su unión durante una solemne ceremonia religiosa impartida en la iglesia de San Francisco de Asís, de esta ciudad capital.

Fruto de su amor son sus siete hijos, quienes a su vez les han dado hermoso regalo al convertirlos en abuelos a través de sus veintidós nietos y once bisnietos que conforman la bonita familia descendencia de quienes contrajeron nupcias hace cincuenta años, esperando un futuro promisorio con la bendición de Dios.

Para dar gracias por el amor que prevalece a través del paso de los años, la salud de los suyos, la renovación de su cariño y la permanencia del respeto, Don José y su esposa Guadalupe llegaron al recinto religioso acompañados por sus hijos, nietos, demás familiares y amigos, quienes planearon la celebración en secreto para beneplácito de la feliz pareja.

Terminada la misa, los esposos junto a sus invitados se dirigieron a un salón social para festejar en grande la especial fecha, en la que conmemoran recuerdos, experiencias de aprendizaje y sobre todo, el sentimiento que los une.

Bailaron el vals con todos sus hijos y nietos, representando así una muestra de cariño hacia la pareja de parte de todos los presentes.

¡Felicidades!