La comidilla política

La verdad… sea dicha

Para congoja de los adustos gobernantes, durante y después de sus andanzas en el poder, a la gente común suele interesarle mucho lo que a estos “angelitos” les acontece en su vida personal y pública. Para algunos ciudadanos curiosos, no conformes con hurgar en el quehacer político de los líderes, también suelen inventarles historias exageradas sobre su comportamiento privado. Por ejemplo: los mandatarios de los Estados y los políticos de alta alcurnia, son por la importancia de su responsabilidad y su calidad de figuras públicas, el blanco perfecto para la chunga y la crítica colectiva, callejera; esa que a veces los medios de comunicación no divulgan, pero que está en boca de todos: Que si el presidente es dueño de los hoteles más importantes, que si el ministro ya se compró una Isla. O simple y sencillamente susurran; el diputado fulano ya no se lleva bien con su elegante mujer. La primera dama gasta a manos llenas, el senador anda en malos pasos, o la diputada está estrenando auto y residencia cuando antes no tenía ni para comer.

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Nunca faltan las afirmaciones espectaculares que entrelazan la realidad con la fantasía sobre las personas que ostentan el poder. Hay una costumbre casi maniática para comentar los pormenores sobre la vida de los políticos y funcionarios, aunque no se tenga plena certeza de lo que se dice. Claro, en algunas ocasiones, los mismos políticos dan pie a jocosos comentarios referentes a su personalidad, y ahí sí son autores de sus propios hierros: Vicente Fox, hizo historia por su manera tan desparpajada y simplista de gobernar, lo que le ganó el mote del presidente más analfabeta que nos ha tocado en México;  dicen, al panista siempre le costaron trabajo las relaciones públicas con sus homólogos de otros países, sobre todo si su adorada Martita no estaba presente para bien aconsejarlo; basta recordar aquella famosa llamada telefónica, cuando don Chente sugirió al mismísimo Fidel Castro, aquello de “comes y te vas” en una cumbre de mandatarios organizada en nuestro país.

En lo que a escándalo se refiere, el sexenio de José López Portillo, pudiera ser catalogado como uno de los más comentados en los medios de comunicación nacional, lógicamente de ninguna manera podía estar fuera del escrutinio popular, el ex presidente López Portillo y su familia dieron mucha tela de donde cortar; baste recordar que luego de “defender el peso como un perro” cuando se vino el problema de la devaluación, López Portillo terminó casándose, aún en su avanzada edad, con una de las vedettes más famosas de México, pero antes, la primera dama, la controversial Carmen Romano, se llegó a murmurar, prácticamente acabó con las finanzas del país, pues la doña era adicta a las compras excesivas, y a regalar fortunas a sus invitados especiales. Uno de los acontecimientos más divulgados es el referente a la muerte del tristemente célebre Luis Donaldo Colosio, de quien según dicen, fue un ex presidente el autor intelectual de su asesinato, rumor que al paso de los años, y en el sentir de muchos mexicanos llegó a convertirse en un reclamo nacional muy repetido, desde luego, en lo oscurito.

Como le digo, en esto de los dimes y diretes donde quiera se cuecen habas. Aquí, en nuestro lindo Nayarit de Nervo, la historia sobre la vida de nuestros mandatarios estatales, la real y la ficticia, desde siempre ha circulado a lo largo de los años, y con la puntualidad acostumbrada en el cambio de poderes; desde el complicado y peleado gobierno de Rogelio Flores Curiel, hasta el folklórico periodo de don Rigoberto Ochoa Zaragoza; de la internacional y elegante gestión de Celso Humberto Delgado Ramírez, hasta el triunfo apabullante de Antonio Echevarría; del polémico gobierno de Ney González Sánchez, a la cariñosa y apreciada gestión de don Emilio M. González. Del polémico final de sexenio de Roberto Sandoval, al naciente gobierno del cambio de Antonio Echevarría García, donde hay todo un libro por escribir.

LOS DIVORCIOS RELIGIOSOS

Habrá nuevas reglas para anular los matrimonios eclesiásticos declaró el Papa Francisco, esto en la idea de hacerlos más rápidos y menos costosos. La verdad es que ya se habían tardado con la reforma, pues al parecer este beneficio sólo era concedido preferentemente a la gente de alcurnia, políticos y Jefes de Estado. Actualmente, según la norma estipulada por el Vaticano, los católicos pueden volver a casarse por la Iglesia y ante el Altar, solamente si un tribunal eclesiástico se los permite después de un largo proceso que tarda varios años, razón por la cual muchos católicos en el mundo se han quejado; ahora el Papa Francisco busca agilizar el trámite con un nuevo reglamento que también podría ser gratuito.

EL BIEN MORIR, A VER QUE DIPUTADO LE ENTRA AL TEMA CON UNA BUENA PROPUESTA

La posibilidad jurídica de que la eutanasia o el bien morir, sea legalmente permitido en personas enfermas que se encuentren en fase terminal, o por muerte cerebral y estado vegetativo, puede ser una realidad. Sin duda un espinoso tema que entrelaza cuestiones de tipo moral, religioso, costumbristas y de ética profesional, pero que es una opción palpable en el caso de muchas familias desesperadas, y desde luego de médicos, que en más de una ocasión se han visto en situaciones comprometedoras, al pensar en tomar una decisión tan seria como el participar en algo sin remedio para agilizar la muerte inminente de alguien que con un gran sufrimiento pide a gritos le permitan morir; un hecho que significa entrar en la disyuntiva de aceptar el sufrimiento de un paciente manteniéndolo con vida artificial, o permitir que los elementos médicos que sostienen su existencia sean retirados para que de forma natural concluya su vida. En cuantas ocasiones no nos ha tocado saber o vivir de cerca la amarga experiencia con amigos, familiares o conocidos que presos de enfermedades incurables como el cáncer, y sufriendo de dolores insoportables, piden a gritos les permitan morir lo antes posible para no seguir con el martirio; luego entonces, es cuando uno se pregunta si el permitirles morir sin intentar alargarles la penosa  vida no es un acto de entera piedad, que también es prueba de la sensibilidad humana. He ahí, otra vez la propuesta para el Poder Legislativo.

NOTICIAS DEL CONGRESO LOCAL

En el Congreso del Estado, los integrantes de la Trigésima Segunda Legislatura, en la idea de abatir la corrupción, han reglamentado sobre las licitaciones de obra pública en Nayarit. Ahora se creará un registro único de contratistas para fortalecer las reglas en materia de invitación restringida, y así evitar la discrecionalidad, de ahí las diversas reformas y adiciones a la Ley de Obra Pública del estado de Nayarit que ya han sido aprobadas en Sesión Pública Ordinaria. Se dan 90 días para instalar el Registro único de Contratistas. Hasta pronto. Para comentarios robleslaopinion@hotmail.com

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