Manuel Narváez, candidato al Senado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha encontrado una interminable lista de quejas sobre los servicios de salud que se les otorgan actualmente en distintos municipios, pero en especial en las zonas serranas, donde la población se siente abandonada y lastimada por las promesas incumplidas de quienes les pidieron el voto, garantizándoles que habría atención médica continua y hasta hoy no se han visto avances palpables.

Ciudadanos que dicen tener que recorrer grandes distancias para ser atendidos parque en sus localidades los centros de salud públicos cierran los fines de semana o a veces no abren en días laborales porque los médicos y enfermeras no se presentan a trabajar, “peor aun, cuando los hayan no tienen las medicinas ahí a la mano y los enfermos tienen que ir a adquirirlas, eso si acaso tienen el dinero para hacerlo, sino pues a aguantarse o esperar lo peor”, señaló el candidato priísta.

El joven político junto con su compañera de fórmula al Senado, han recibido los reclamos de quienes ya pasaron por amargas experiencias, donde desde un piquete de alacrán hasta un parto complicado o una enfermedad de gravedad, ha obligado a que vendan sus parcelas o empeñen lo poco que tienen para salir adelante, hubo quien les platicó en uno de los encuentros sostenidos este miércoles, que se van con su paciente al hospital y ahí mientras dura el internamiento, se la pasan sin comer porque no tienen ni un peso para comprar algún alimento.

Recordaron que en la última campaña les dijeron que los hospitales y las clínicas públicas tendrían médicos y medicinas, “y a poco más de 8 meses, el cambio no se ha visto, seguimos batallando hasta para que nos curen una gripa”.

Ambos candidatos se comprometieron a gestionar para que exista una mejor atención médica y que se abastezca de medicamentos los centros de salud ubicados en especial en zonas de alta marginación y difícil acceso, “nosotros queremos trabajar por todos y cada uno de ustedes, porque se trata de Nayarit”.