Detrás de “las ramadas” y restaurantes que se encuentran en esta playa, el manglar se encuentra contaminado por muebles, basura en general, electrodomésticos en desuso.
La zona del manglar de Boca de Tomates, ubicada en Puerto Vallarta, Jalisco, necesitará más que una brigada de limpieza debido a la contaminación que los mismos habitantes están causando, así lo señala Juan José Navarro Amaral, subdirector de la dependencia de ecología del municipio.
Por la mañana de este martes se llevó a cabo la actividad de saneamiento en esta zona de mangle en Boca de tomates, pues es prioridad la conservación de esta área natural para el municipio por los beneficios ambientales que tiene para la zona la bahía.
La situación actual no favorable puesto que detrás de “las ramadas” y restaurantes que se encuentran en esta playa, el manglar se encuentra contaminado por muebles, basura en general, electrodomésticos en desuso; pareciera que las personas lo utilizan como vertedero de desechos y además se ha percibido que el mangle se ha ido cortado poco a poco.
Se estima que son aproximadamente 10 ramadas (restaurantes) los que provocan esta intoxicación al área verde y zona de estero.
La subdirección de ecología ha interpuesto denuncias ante PROFEPA por esta situación, y por tanto esto ha ayudado a la disminución de la tala del mangle, sin embargo no ha sido suficiente. “es necesario que todos los que viven aquí o trabajan pongan su granito de arena, para que se den cuenta que ellos son los que generan esto (…) Una actividad de limpieza no será suficiente.” explica el titular.
Navarro Amaral indica que el principal objetivo de es crear conciencia, pues la falta de esta hacia la conservación de nuestro entorno es mucha. “No percibo, un ambiente de trabajo, un ambiente de progreso, inmerso en un ambiente de desastre”
“Es importante la reflexión, es importante que asumamos la responsabilidad como ciudadanos en la conservación de los ecosistemas y no debiera de ser posible que la autoridad esté realizando cada vez más actividades de limpieza, ese no es el objetivo fundamental, lo esencial es que el ciudadano se haga responsable de sus acciones de mitigar los efectos de las actividades de todos los días” apuntala.
Añade que una de las pautas de ecología es la sanción ante la evidencia de un daño o actividades que generen daño al área natural, ante esto se llevará a cabo una serie de procedimientos con la intención de hacer conciencia, para la reparación y compensación de actos por contaminación. “Se ha buscado el escenario de educación y concientización, a veces no es suficiente y tenemos que tomar acciones más drásticas” fueron sus palabras.
En la actividad de limpieza participó personal de servicios públicos municipales, los palaperos del área, comunidad de la delegación de las juntas, y personal de ecología. Quienes estuvieron dispuestos a recoger los residuos dispersos por la playa y zona de manglar.