Lagrimita, candidato. Fue una fregadera, perdonará usted el francés, pero eso fue lo que le hicieron a Guillermo Cienfuegos, mejor conocido comoLagrimita. El “payaso correcto”, como se hizo llamar durante su precampaña, fue notificado hace un par de días que, siempre, sí podrá contender por la alcaldía de Guadalajara como candidato independiente. Le habían dicho que no, pero que ahora sí… ¡a una semana de las elecciones! El tema aquí, más que de la posibilidad de triunfo, más que hablamos del payaso Lagrimita, es el derecho de participación y las laceraciones que le hacen en sí a la figura de las candidaturas independientes. ¿No analizaron bien en su momento? Al parecer no, el TEPJF, echó para atrás lo resuelto por el Instituto de Participación Ciudadana de Jalisco, autoriza a Lagrimita a hacer campaña, él con todo el optimismo dice que sí, pero… ¿con tres para hacer proselitismo? Ahora sí que esto no es más que una payasada y no precisamente del candidato en cuestión.
Le sacaron al #3de3. Por la coyuntura era una obligación. Cada uno de los aspirantes a un cargo de elección debía, de-bí-an presentar sus declaraciones —patrimonial, de intereses y hacendaria— y no porque fueran parte de una iniciativa, sino porque los tiempos en donde es la corrupción el punto en común entre todos los grupos políticos exigen transparencia. ¡No le entraron ni algunos candidatos independientes! Sólo 345 candidatos presentaron sus tres declaraciones. Ah, pero cosa interesante, ya nos enteramos que a algunos se les “olvidó” incluir algunos bienes, entonces, para el caso es inútil y cínico que le hayan entrado a una iniciativa que debería, repito, ser acto obligado para todo aquel que dese ser servidor público. Todavía no gana la elección y ya nos están viendo la cara. Además, de que le “sacaron” a éste, el más elemental ejercicio de honestidad, hace unas semanas el INE reportaba que solo 58 de cuatro mil 496 aspirantes a una diputación federal habían entregado su currículum, mismo que sería subido al portal del órgano electoral para consulta de los electorales. Si no quieren que conozcamos su preparación académica, mucho menos lo que cargan en la cartera…
Se busca fuero. Para algunos, los actos de honestidad no son parte de su agenda, ¿pero qué tal buscan servirse con las bondades que ofrece el servicio público? Leía ayer así en Animal Político:“Nueve candidatos que aspiran a una diputación —y al fuero que viene con el “paquete”—, tienen pendientes ante la justicia. En ese caso están un perredista de Puebla acusado de tentativa de homicidio contra su esposa. Un panista —también de Puebla— inhabilitado para ejercer cargos públicos en lo local, y una candidata de Nueva Alianza en el DF que se ha escondido ante una orden de arresto por un adeudo hipotecario…”, así nomás, como una prueba de la clase política que nos espera los próximos años.