Los militares que participen en el control de manifestaciones en Venezuela estarán autorizados a utilizar armas de fuego en situaciones de “violencia mortal”, según una controvertida resolución gubernamental y que el alto mando militar defiende como un “documento hermosísimo”.
En la resolución, publicada en la Gaceta Oficial y que enumera normas sobre la actuación de la Fuerza Armada al momento de ejercer “funciones de control del orden público” en manifestaciones, se autoriza el “uso de la fuerza” gradual “partiendo de la presencia ostensiva, hasta el uso del arma de fuego”.
Más adelante, entre una serie de lineamientos sobre el respeto a los derechos humanos, se establece el “uso progresivo de la fuerza” y en el caso de que se desencadene una situación de “violencia mortal”, el funcionario militar podrá responder “con el arma de fuego o con otra arma potencialmente mortal”.
Esta normativa, blanco de numerosas críticas, se publicó a unos días de que se cumpla un año del inicio de la ola de protestas opositoras, que de febrero a mayo de 2014 sacudieron a Venezuela con saldo de 43 muertos.
Vladimir Padrino López, ministro de Defensa y autor de la iniciativa, se refirió precisamente a “esos hechos de violencia de principios del año pasado” para justificar y defender las normativa durante un acto público en Caracas.