Hay quienes se cuelgan de la fama de sus padres para hacer de las suyas y meterse en problemas con la justicia, sin embargo, este ‘junior’ ha sobrepasado los límites con sus excesos y ahora está siendo buscado por la policía inglesa, se trata de Chester Hanks.
Así es, el hijo del estrella de Hollywood, Tom Hanks, perdió la cabeza y destrozó la habitación de un hotel, luego de que un trío de chicas se negara a mantener un encuentro sexual con él.
El rapero con antecedentes en el consumo de sustancias tóxicas, estuvo hospedado en una habitación del hotel Arora, cercano al aeropuerto de Gatwick, pero luego de la fiesta llegó acompañado de las 3 chicas quienes al negarse a complacerlo, provocaron la furia del pequeño Hanks y éste se puso violento.
Arrancó la televisión de la pared y rompió en mil pedazos uno de los espejos, sumando un total de 1800 euros (31,500 pesos) en daños, y aunque para ser hijo de quien es no debería ser demasiado, Chet aún no ha pagado ni un centavo.
Los primeros en denunciar el daño fueron los propios trabajadores del hotel al descubrir el estado de la habitación, y ahora será Tom, quien jamás se vio involucrado en un escándalo, quien tendrá que pagar los ‘espejos rotos’.